¿Y si seguimos siendo imbatibles?
Ya han pasado 10 meses desde que un buen día cambió nuestra existencia y el mundo dejó de ser como lo conocíamos. El sábado anterior habíamos estado en un concierto, probablemente habíamos hablado a menos de 1,5 metros con más de 15 personas y habíamos cerrado algún bar. De un plumazo se nos borró la vida normal y nos encerramos, y aunque no viésemos ex…